RNtv Briconsejo nº 36 Sobran los motivos para ir a la huelga el próximo 8 de marzo
Este próximo 8M, Día Mundial de la Mujer Trabajadora, toda la clase obrera está llamada a secundar y participar en una jornada de Huelga General de 24 horas.
Como ya hiciéramos el pasado año, con una huelga histórica, desde CGT nos vamos a sumar a las reivindicaciones del Movimiento Feminista, por compartirlas casi en su totalidad y por llevar años exigiéndolas con innumerables acciones desde nuestra militancia anarcofeminista.
Sobran los motivos para ir a la huelga el próximo 8 de marzo. Tenemos que acabar con la desigualdad en el ámbito laboral, económico y social de las mujeres. Hemos de poner fin a la desigualdad que se produce de la división sexual en este sistema capitalista y patriarcal. Debemos exigir la retirada inmediata de todas las políticas y leyes de nuestro sistema que conllevan a la desigualdad en el acceso al empleo y la promoción profesional de las mujeres, así como la lucha contra la brecha salarial y la desigualdad de las pensiones.
La Huelga General del próximo 8 de marzo se hace necesaria porque todavía se nos sigue educando, a hombres y mujeres, bajo reglas y valores sexistas y machistas. En el ámbito laboral es urgente conseguir la implantación de Planes de Igualdad en empresas, señalando aquellas que los incumplen. Igualmente, urge acabar con el acoso en los centros de trabajo, la precariedad laboral y la temporalidad, con esos contratos que impiden que las personas puedan compaginar la vida familiar con la profesional.
No debemos olvidarnos en esta huelga que la lucha también es por la consideración de las tareas de cuidados como trabajo a derecho a remuneración, que las empleadas del hogar puedan equipararse al régimen general con todos sus derechos. Y no podemos olvidarnos durante este día de lucha de nuestras compañeras migrantes.
Importantísimo es lograr también el fin, de una vez por todas, del terrorismo machista, causante de más de 900 feminicidos desde que se contabilizan los asesinatos de mujeres. Desde CGT creemos que las instituciones tienen que dejar de mirar hacia otro lado y deben dotar con presupuestos reales y efectivos todas aquellas políticas encaminadas a proteger a las mujeres en peligro.
Y en último lugar, exigiremos durante nuestra huelga feminista que las religiones, especialmente la católica, dejen de inmiscuirse en la lucha y los derechos de las mujeres a decidir sobre su sexualidad, sobre su propio cuerpo y en definitiva sobre todo aquello que les afectan como personas.
Por todos estos motivos y porque aún nos queda mucho camino por recorrer hasta lograr una sociedad feminista y libertaria, la huelga del próximo 8M debe ser masiva. Nos vemos en las calles, ¡a la huelga, compañeras!